Sin lugar a duda, los rellenos faciales se han posicionado como una de las técnicas más demandadas por los pacientes que buscan rejuvenecer y mejorar el aspecto de su rostro.
Los rellenos faciales son tratamientos mínimamente invasivos, indoloros y con los que puedes obtener resultados muy efectivos que te permitirán lucir un aspecto facial mucho más joven con resultados muy sutiles y naturales.
Se le denominan tratamientos con rellenos faciales a todos esos procedimientos en los que se inyectan sustancias en el rostro para devolverle el volumen perdido y lucir más joven. Algunos de estos rellenos faciales utilizan productos compatibles con nuestro organismo, aportando vitaminas y extras de hidratación a nuestra piel, para que recupere su elasticidad natural y la luz que hará que su rostro rejuvenezca.
Existen muchos tipos diferentes de rellenos, cada uno con su indicación y sus ventajas, el cual debe ser elegido por el paciente en compañía de un profesional médico quien determinará cual es el más oportuno en cada caso. Los rellenos más recomendados por los profesionales médicos son los biocompatibles, reabsorbibles y con años de garantía por su efectividad y por la obtención de resultados naturales duraderos.
El tratamiento más polivalente y que dispone de una seguridad y resultados excelentes es el de rellenos faciales con ácido hialurónico. Cuenta con una gran capacidad de relleno y consigue un efecto mucho más duradero.
¿Qué debes hacer antes de recurrir a un tratamiento de rellenos faciales?
Es fundamental, como en todos los tratamientos de medicina estética, un diagnóstico previo, detallado y personalizado antes de realizar la técnica de relleno facial ya que no existen dos formas iguales de aplicar el tratamiento. La aplicación se debe realizar en las zonas en las que queremos restaurar el volumen perdido, cuidando no excedernos para evitar romper la armonía de nuestro rostro.
El principal error cometido por los pacientes es acudir a centros estéticos que no cuentan con médicos especialistas, lo que se traduce en resultados nada satisfactorios y en un temido relleno que cambia por completo la expresión de la cara. Recuerda que actualmente se busca tener una mejor apariencia, pero manteniendo la naturalidad y los rasgos que la distinguen.
¿Cuáles son sus desventajas?
Después de una infiltración pueden percibirse en algunos casos, una leve inflamación en el rostro, la cual desaparecerá en 24 horas, sin embargo, es tan ligera que es poco perceptible a la vista por lo que el paciente puede incorporarse a sus actividades habituales al finalizar la sesión.
No deja hematomas posteriores al tratamiento en casi ningún caso, esto dependerá mucho de la sensibilidad de la zona donde se haya aplicado, pero puede reducirse la posibilidad de que aparezcan con una aplicación de frío local después de la infiltración.
Estos tratamientos son efectivos y seguros, ofrecen muchos beneficios para conseguir un rostro firme, joven y sobre todo de aspecto natural, pero es extremadamente importante informarse antes sobre el producto que se inyectará y cuál es la preparación que debe tener el médico que está realizando la aplicación de este.
Este tipo de procedimientos son para ti si lo que buscas es mejorar, prevenir y frenar los signos de la edad y reponer el volumen perdido en rostro y cuello, para conseguir una piel visiblemente rejuvenecida, tersa y radiante. Esperamos haber sido de ayuda y que muchas de tus dudas hayan sido resueltas, si quieres saber más sobre estos temas, te invitamos a seguir nuestras próximas entradas, a seguirnos en redes sociales.